(14-05) David Morales @ Sunflowers

[Josechu]

SUNFLOWERS @ MACUMBA
PRESENTA A: DAVID MORALES
Sábado 14 Mayo 2005
Plaza de la Estación de Chamartín, s/n. Madrid
Horario: De 00:00 h. a cierre
Precios: 15/18 € + 1 consumición
DJ’s Residentes: JAVIER GONZÁLEZ + RENÉ SANDOVAL


DAVID MORALES
Con su Grammy de 1999 en la categoría “Remixer of the Year”, su conocidísimo sello DEF MIX, su gira constante por todos los clubs del mundo, y su residencia en el club Stereo de Montreal, Morales aprovecha su brillante trayectoria y su enorme influencia para predicar el evangelio de la música house en las pistas de baile más aclamadas alrededor del mundo entero. “Yo vengo de una era diferente de la música”, dice David. “Me gusta pensar que estoy aquí para educar a la gente. Intento armonizar los sonidos del ayer con los del mañana para que las nuevas generaciones puedan comprenderlo”. Para Morales el Grammy representa el reconocimiento de la industria a su trayectoria profesional. Habiendo remezclado a las más grandes y exitosas estrellas de la música, como Mariah Carey, Aretha Franklin, Madonna, Janet Jackson, Tina Turner o Jocelyn Brown, David Morales está en posesión de una agenda de trabajo que se puede leer como si fuera el “Quién es Quién” del circuito de las grandes divas de la canción.

Tanto en el estudio de grabación como en la cabina de DJ, Morales no pierde el tiempo “haciendo proyectos. “Cuado vamos al estudio no tenemos un plan”, dice. “Nosotros hacemos una sesión en directo, como su estuviéramos pinchando en un club. La “teoría” no forma parte de nuestro trabajo, éste se basa en el corazón y en la emoción, en el espíritu. Mi oído sabe que estoy haciendo bailar a la gente”.

En el estudio, David depende estrechamente de sus instrumentos: KORG Z1, E-mu Orbit y Planet Phatt, y una Roland JV-2080. Mi 2080 está a tope, tiene de todo, tarjeta Pop, tarjeta World, tarjeta Techno, tarjeta Piano... yo no lo puedo hacer todo por mí mismo...”. Pero los músicos en directo también juegan un papel muy importante en los excelentes remixes de Moarales. “No importa lo buenos que sean los sonidos de los teclados, la esencia de un buen sonido de flauta está absolutamente basada en el aliento”.

Cuando se habla de cajas de ritmos, Morales opina que “diferentes máquinas tienen sonidos diferentes. Algunas tienen un toque de suavidad, otras son más desiguales. Yo puedo samplear el mismo sonido en la Akai MPC60, en una S950/S3000, o en una [E-mu] SP-1200... y el mismo sonido tiene sentimientos diferentes”. Esa es la razón por la que él siempre tiene a mano un montón de cajas de ritmo y módulos de percusión (que también incluyen una E-mu Procussion y una clásica Roland TR-909. “Lo que uso depende del tipo de sonido o sentimiento que esté buscando. Si estoy haciendo un remix comercial, por ejemplo, la 909 puede ser demasiado oscura”.

Sus sesiones como deejay durante los tempranos días de la música house en el “Better Days” de Nueva York y el “Ozone Bar” de Brooklyn, fueron la base esencial en la carrera de Morales como remezclador. “En 1985 solíamos mezclar los discos en directo desde la cabina usando tres platos y una pequeña caja de ritmos Roland TR-505”.

Morales espera que su residencia en el club “Stereo” haga prender el fuego de aquel espíritu musical de la vieja escuela de su juventud, aquel ambiente que se vivió en locales legendarios como el “Loft” o el “Paradise Garage” de Nueva York. “Quiero crear algo especial. “Stereo” es un auténtico club de baile; lo que sus promotores están vendiendo es música en estado puro”. Fue el mismo David quien pidió una residencia en “Stereo”, seducido por el monstruoso equipo de sonido del club. “Eso es algo que yo tengo muy claro desde siempre. Los equipos de un club están hechos para trabajar con ellos, para aprovecharlos y explotarlos a tope. Yo puedo hacer retumbar la sala como si fuera un atronador tren al máximo de velocidad. Puedo manejar los bajos y hacerte saltar sobre el suelo y hacerte caer, sin que tú siquiera te estés enterando”.

Morales ha recorrido una largo camino desde sus humildes comienzos como DJ. “Mi madre todavía está conmocionada”, dice Morales. “Ella recuerda cuando yo me ponía en casa con dos platos, intentando hacer ruido. Y ahora, cuando el dinero ya es una razón ridícula, al final del día nadie puede quitarme lo mucho que disfruto haciéndolo. Aunque no hubiese llegado a ser famoso, seguiría siendo DJ”.